Familias enteras con niños y niñas menores de edad, disfrutan el último día de vacaciones en el centro de la ciudad de Tulancingo, previó el regreso a clases en línea para el municipio; pesé al estar en color rojo en la entidad, tiendas de ropa, así como de fast food, abarrotadas.
Así lució el centro del Valle de Tulancingo, el día de ayer domingo 29, en vísperas del regreso a clases, la afluencia de la gente, se hizo notoria desde temprana hora, con familias enteras buscando el desayuno entre puestos de tamales, barbacoa, panaderías, etc.
Después de pasado mediodía, los flujos de personas de todas edades se veían transitar por las principales calles de la ciudad, unas con cubrebocas, otras más portándolo de manera incorrecta, otras más, no lo portaban.
Algunos padres de familia, quienes se paseaban por el jardín de la floresta, refirieron que, al ser el último día de vacaciones para los pequeños de la casa, consideraban necesario el salir por un momento y tener un desestres, tanto para ellos y para sus hijos, pues el regreso a clases, suele ser desgastante.
Otros más, consideraban como irresponsable el exponer a sus hijos al salir de casa y pasearse por la calle, pues en las últimas semanas en el estado, ha existido un debate por sí es conveniente o no, el regreso a clases.
“Los papás que no quieren el regreso a clases, son los mismos que están comiendo y comprando como si nada con sus hijos en las tiendas” dijo Dora Sánchez, madre de dos niños.
En la contra parte a esta situación, Edith y Judith Nery, hermanas y mamás de dos hijos cada una, menciona como equivocada la postura de la secretaría de salud del estado, al no permitir el regreso a clases de manera presencial, pues consideran que “ya es necesario el volver a salir, el rehacer la vida, el volver a aprender”.
Algunos otros padres, que se encontraban en la periferia del centro, mencionan que, al ser el regreso a clases, se vieron en la necesidad de salir, para comprar algunos artículos de papelería indispensables para el nuevo ciclo escolar.
