Con un solemne y magno evento religioso se llevó a cabo en la Catedral Metropolitana la apertura del Año Jubilar por los 100 años de la Adoración Nocturna Mexicana en la Diócesis de Tulancingo, a la que acudieron cerca de mil 700 adoradores nocturnos con 125 banderas de diferentes parroquias.
"Estamos reunidos frente a la casa del Dios y puerta del cielo, en este día en que comenzamos nuestros Año Jubilar con motivo de los 100 años de la creación de la Adoración Nocturna de nuestra Diócesis", expresó, monseñor Domingo Díaz Martínez, arzobispo de la Arquidiócesis al presidir este acto.
Con la presencia de cientos de feligreses, sacerdotes de la región e integrantes de la Adoración Nocturna, el clérigo detalló que la Adoración Nocturna inició en la iglesia catedral el año de 1925, a instancias de su predecesor, el Ilustrísimo Sr. Vicente Castellanos y Núñez.
"Desde sus orígenes en esta Diócesis, la adoración al Santísimo Sacramento ha ido creciendo, contándose actualmente con 42 comunidades parroquiales en que se celebran los turnos de adoración", informó
Destacó que al celebrar sus cien años de existencia le piden al Padre del cielo que conceda la gracia de seguir acudiendo, cada vez con mayor fervor a encontrar a Cristo en la Eucaristía, pues él es nuestro alimento para la vida eterna.
Al dar la bienvenida a la celebración eucarística, Monseñor expresó que es momento de revivir de forma significativa la historia de su fundación, "hemos de remontarnos a aquel año de 1925, cuando se aceptaba la erección canónica de la primera sección adoradora y de constituirse el primer consejo Superior".
El presbítero Honorio Ramírez Pérez, coordinador diocesano de la Adoración Nocturna expresó que este es un acontecimiento muy importante para la Diócesis, por lo que confió en que se conozca a Jesús en la Eucaristía y que haya muchos que integren la cofradía de la Adoración Nocturna.
"El día de hoy es un gran gozo es un gran acontecimiento, En mi corazón, en mi mente y en todo mi ser es un agradecimiento eterno a nuestro Señor Jesucristo porque nos ha permitido estar en este tiempo y en este lugar para aperturar el Año Jubilar y darle gracias al señor lo bueno que ha sido con nosotros y adorar a los más grande que tenemos a Jesús en la Eucaristía", destacó el presidente arquidiocesano Víctor Alcibar Méndez.
Explicó que bajo el pontificado del Papa Pio XI y siendo obispo de nuestra Diócesis de Tulancingo, Monseñor Vicente Castellano y Núñez, se firma el decreto de erección canónica y se funda la adoración nocturna en la Diócesis.
Este grupo de oración tiene por objeto adorar y amar a Jesús en la Eucaristía. “Nuestra misión como Adoración Nocturna es pedir perdón a Dios por nuestros pecados y por los del mundo entero", abundó Alcíbar.
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