TULA DE ALLENDE, HGO.-Algunos parquímetros instalados en céntricas calles de esta ciudad aún no funcionan bien y se tragan las monedas y otros de plano no sirven, luego de suceder la inundación aquí hace más de ocho meses.
Por tal razón, algunas personas dejan sus respectivos automóviles estacionados durante todo el día en las arterias, lo que provoca que no haya lugares para estacionar automotores en la vía pública.
En esos términos se expresó, ayer, el comerciante Juan José Jiménez, quien agregó que ojalá personal de seguridad pública municipal arregle pronto los sofisticados aparatos que están descompuestos desde hace tiempo.
El entrevistado puntualizó que a raíz de que no hay límite de tiempo para aparcar automotores en principales calles de la ciudad, entre ellas Zaragoza, Leandro Valle, Cuauhtémoc y 5 de Mayo, no existe orden entre choferes en cuanto al aspecto de estacionamiento público.
Juan José Jiménez indicó que por esta situación han bajado considerablemente las ventas para comerciantes establecidos del primer cuadro, durante últimos días, ya que posibles consumidores no encuentran espacios para estacionar sus vehículos y mejor optan por irse a otros comercios ubicados en colonias aledañas o tiendas de auto servicio.
“Literalmente, los clientes dan vueltas y vueltas por largo rato en la manzana que se ubica en las calles Hidalgo, Zaragoza y 5 de Mayo y al no encontrar un sitio vacío en la calle para aparcar sus automotores, deciden irse a otros lugares para realizar sus compras” dijo el comerciante.
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Por último, citó que son por lo menos diez parquímetros que no funcionan adecuadamente y otros más que ya no sirven, luego de suceder la contingencia aquí en este sector de la ciudad, en el pasado mes de septiembre del año anterior.
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