/ jueves 27 de octubre de 2022

Impuestos en México, conoce cuáles son

Todos los ciudadanos contribuimos de una u otra forma a los gastos del país

En México, todos los ciudadanos tenemos la obligación de pegar impuestos, ya sea como persona moral o como personas físicas (dueños de empresas, locales establecidos o negocios propios).

De acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), los impuestos son una contribución (pago) en dinero o en especie, de carácter obligatorio, con la que cooperamos los ciudadanos para fortalecer la economía del país.

Por mandato constitucional (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Art. 31, Fracción IV) es obligación de los mexicanos contribuir de manera proporcional y equitativa a los gastos públicos del país. Esto lo hacemos a través del pago de los impuestos.

En nuestro país, los impuestos que debemos de pagar al gobierno regularmente se clasifican en tres tipos.

Los impuestos federales, son una obligación de la mayoría de los contribuyentes mexicanos, así como de residentes extranjeros que ejerzan una actividad económica dentro del país:

- Impuesto Sobre la Renta (ISR)

- Impuesto al Valor Agregado (IVA)

- Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS)

- Impuesto sobre Automóviles Nuevos

- Impuesto sobre Depósitos en Efectivo (IDE)

- Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU)

Los impuestos estatales, aplican dentro de la frontera de cada estado y no pueden aplicar a otros. Cada estado cuenta con una norma tributaria o Ley de Hacienda:

- Predial

- Tenencia

- Agua

- Tránsito (licencias de conducir, tarjetones para taxistas, tarjetón para pasajeros, etc.)

- Registro civil (actas de nacimiento, matrimonio, búsqueda de datos, divorcios, etc.)

- Impuesto sobre nóminas

- Notaria

- IEPS

- Impuesto sobre Automóviles Nuevos

- Otros impuestos son sobre loterías, rifas, sorteos, y por la prestación de servicios de hospedaje.

Los impuestos municipales son los tributos a favor de los gobiernos locales y que en su cumplimiento no originan una contraprestación directa de la municipalidad al contribuyente:

- Impuesto Predial

- Impuesto sobre Adquisición de Inmuebles y Transmisión de Dominio

- Impuesto para el Fomento Deportivo y Educacional

- Impuesto para el Fomento Turístico, Desarrollo Integral de la Familia y Promoción de la Cultura

- Impuesto sobre Asistencia a Juegos Permitidos y Espectáculos Públicos

- Impuesto para el Mantenimiento y Conservación de las Vías Públicas

- Impuesto por Alumbrado Público

“La recaudación de los impuestos se destina a la satisfacción de ciertas necesidades de carácter colectivo como: la educación pública, la impartición de justicia, la seguridad, los hospitales públicos, la infraestructura y servicios de vías públicas, programas y proyectos de apoyo al desarrollo social y económico, necesidades que por separado cada persona no podría pagar por sí sola, pero que, en cambio, se pueden atender con las aportaciones de todos”, precisa el SAT.

Estos servicios ocasionan gastos y gracias a nuestras contribuciones la Federación cuenta con los recursos necesarios para: disponer de escuelas con profesores; bibliotecas, hospitales y centros deportivos; el mantenimiento de las calles y su iluminación; para construir y arreglar las carreteras; para contar con un servicio de bomberos, policías y militares, entre otros.

En México, todos los ciudadanos tenemos la obligación de pegar impuestos, ya sea como persona moral o como personas físicas (dueños de empresas, locales establecidos o negocios propios).

De acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), los impuestos son una contribución (pago) en dinero o en especie, de carácter obligatorio, con la que cooperamos los ciudadanos para fortalecer la economía del país.

Por mandato constitucional (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Art. 31, Fracción IV) es obligación de los mexicanos contribuir de manera proporcional y equitativa a los gastos públicos del país. Esto lo hacemos a través del pago de los impuestos.

En nuestro país, los impuestos que debemos de pagar al gobierno regularmente se clasifican en tres tipos.

Los impuestos federales, son una obligación de la mayoría de los contribuyentes mexicanos, así como de residentes extranjeros que ejerzan una actividad económica dentro del país:

- Impuesto Sobre la Renta (ISR)

- Impuesto al Valor Agregado (IVA)

- Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS)

- Impuesto sobre Automóviles Nuevos

- Impuesto sobre Depósitos en Efectivo (IDE)

- Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU)

Los impuestos estatales, aplican dentro de la frontera de cada estado y no pueden aplicar a otros. Cada estado cuenta con una norma tributaria o Ley de Hacienda:

- Predial

- Tenencia

- Agua

- Tránsito (licencias de conducir, tarjetones para taxistas, tarjetón para pasajeros, etc.)

- Registro civil (actas de nacimiento, matrimonio, búsqueda de datos, divorcios, etc.)

- Impuesto sobre nóminas

- Notaria

- IEPS

- Impuesto sobre Automóviles Nuevos

- Otros impuestos son sobre loterías, rifas, sorteos, y por la prestación de servicios de hospedaje.

Los impuestos municipales son los tributos a favor de los gobiernos locales y que en su cumplimiento no originan una contraprestación directa de la municipalidad al contribuyente:

- Impuesto Predial

- Impuesto sobre Adquisición de Inmuebles y Transmisión de Dominio

- Impuesto para el Fomento Deportivo y Educacional

- Impuesto para el Fomento Turístico, Desarrollo Integral de la Familia y Promoción de la Cultura

- Impuesto sobre Asistencia a Juegos Permitidos y Espectáculos Públicos

- Impuesto para el Mantenimiento y Conservación de las Vías Públicas

- Impuesto por Alumbrado Público

“La recaudación de los impuestos se destina a la satisfacción de ciertas necesidades de carácter colectivo como: la educación pública, la impartición de justicia, la seguridad, los hospitales públicos, la infraestructura y servicios de vías públicas, programas y proyectos de apoyo al desarrollo social y económico, necesidades que por separado cada persona no podría pagar por sí sola, pero que, en cambio, se pueden atender con las aportaciones de todos”, precisa el SAT.

Estos servicios ocasionan gastos y gracias a nuestras contribuciones la Federación cuenta con los recursos necesarios para: disponer de escuelas con profesores; bibliotecas, hospitales y centros deportivos; el mantenimiento de las calles y su iluminación; para construir y arreglar las carreteras; para contar con un servicio de bomberos, policías y militares, entre otros.

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