Con una jornada hasta el mediodía, un convivio y sin faltar las bebidas alcohólicas, así celebraron, los albañiles de una obra de un edificio departamental que se construye en las calles céntricas del municipio de Agua Blanca.
En punto de las 11:00 horas, Cirilo Martínez, el maestro de la obra, partió hacia el panteón municipal de Agua Blanca de Iturbide, con su fe bien puesta y su cruz adornada con flores y un listón morado, para ser bendecida.
Al lugar acudieron varias personas que se dedican a la construcción, quienes acudieron con sus familias a escuchar misa y a bendecir a su respectiva cruz.
En la obra, ya estaba prácticamente todo listo para recibir la cruz y colocarla justo en la entrada del edificio.
En la parte trasera de la obra, colocaron unas piedras, para poner el comal y asar la carne, los nopales, las cebollitas, y los chiles, mientras que unas llantas sirvieron de mesa, también adecuaron una tabla con piedras que sirvió de asiento.
En un bote que ocupan para la mezcla, pusieron a enfriar el cartón de cerveza, que no podía faltar para brindar por su día.
En este oficio solo se trabaja para sobrevivir, compartió Alberto Solís García, quien desde hace 20 años se dedica a la albañilería y que forma parte de la cuadrilla de albañiles que trabaja en la obra.
Fue así como entre cal, arena, cemento y alambre, los “maestros de la cuchara” festejaron el Día de la Santa Cruz.