Una llamada telefónica que alertó sobre la supuesta presencia de otra bomba en el interior del juzgado primero penal y mercantil que se localiza a un costado del Centro de Readaptación Social para Adultos (CERESO) de Tula, provocó, esta tarde, movilización de agentes de diversas corporaciones de policía y de la Guardia Nacional, así como del Ejército Mexicano; finalmente, todo resultó falsa alarma porque no encontraron nada.
Según el reporte oficial, minutos después del mediodía de este viernes, policías estatales y municipales, así como militares destacados en la región de Tula, fueron alertados sobre la presencia de un supuesto artefacto explosivo adentro de dicha oficina gubernamental, dependiente de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), localizada en la parte más alta de la colonia La Malinche.
En dicho juzgado penal, trabajadores realizaban sus labores cotidianas, cuando fueron avisados por uniformados sobre la situación de emergencia, lo que provocó que fueran evacuados de inmediato.
Los uniformados revisaron detalladamente las instalaciones del juzgado primero penal y mercantil, pero no encontraron nada.
Por tal razón, se desactivó la alerta de riesgo, la cual se había activado desde que se recibió la llamada telefónica, a través del número de emergencia 911.
Empleados estatales de dicho juzgado, así como los que laboran en el juzgado civil y familiar, regresaron a laborar de forma normal.
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Como se recordará, ayer, jueves, se originó otra emergencia similar en ambos juzgados dependientes de la PGJEH, donde al final sí localizaron dos artefactos explosivos, uno dentro de una mochila color negra, en el interior del juzgado civil y familiar, y otro en el juzgado penal.
