Se incrementa la presencia de abejas y otros insectos, por lo que hay que tener cuidado, alerta Protección Civil de la ciudad.
Ya se les encuentra en jardines de las casas, a campo abierto, también en bodegas, en las cornisas de viviendas y hasta en los cementerios.
Su presencia resulta sorpresiva, y ante la ya inminente llegada de la primavera, se multiplica el número de estos insectos, que por cierto, una vez que entierran su aguijón pueden causar alergias a las víctimas.
Para muchos, las avispas y jicotes, por ejemplo, son un terror, además de las abejas ya citadas.
Hay quien les tiene pánico y al verlas, las empiezan a golpear, a mojar y hasta correr, motivo por el que se presentan la mayoría de las agresiones por parte de estos insectos.
Algunas personas, generalmente tan pronto detectan un enjambre o están cerca de algún animal de estos, sin reparo quieren dañarlos sin tomar las medidas necesarias.
A pesar de ser pequeños si se tiene alergia a las toxinas de las abejas, avispas o jicotes, incluso, pueden llegar al hospital, cuando se es víctima de ellos.
Lo más recomendable es que, al detectar un enjambre o colmenas, se llame a Protección Civil para que ellos con sus técnicas, puedan retirarlas o aislarlas.
Se ha dicho en numerosas ocasiones que los insectos son inofensivos y solo atacan si son provocados, por lo que la gente no debe acercarse a los panales de abejas ni de avispas.
Si sucediera que por accidente, se encuentre cerca de algún panal lo más recomendable es irse cautelosamente; los movimientos deben ser lentos, es una de las recomendaciones.
Cuando un insecto clava su aguijón, hay que poner compresas frías mientras se llega con el médico; hay quienes no saben que pueden ser alérgicos y hasta presentar "choque anafiláctico".
Por ello la importancia de acudir rápidamente a cualquier unidad de salud o médico de confianza.
Cabe señalar que un ataque de abeja, puede ser letal.