“No vamos a detenernos, vamos a erradicar esto que no sólo daña materialmente, no sólo es lo que pierde la nación por este comercio ilegal, este mercado negro de combustibles, sino el riesgo, el peligro, la pérdida de vidas humanas”, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador, con respecto a los hechos ocurridos ayer en el municipio de Tlahuelilpan, en el estado.
En conferencia de prensa indicó que desgraciadamente ayer le tocó a la gente de Hidalgo, pero es un riesgo constante, permanente.
“Duele mucho el que estas prácticas se hayan arraigado en los últimos tiempos de nuestro país, porque las imágenes de la gente con cubetas, con bidones, con recipientes para sacar gasolina o Diesel es un asunto, desgraciadamente, que se extendió a toda la zona petrolera, donde pasan ductos hay estas prácticas”, apuntó.
Por ello, dijo, se buscará generar oportunidades de empleo y de desarrollo para la gente, a fin de que no se vean obligados a incurrir en este tipo de acciones por necesidad.
López Obrador llamó a la gente a que se abandonen estas prácticas y que no se apoye a los que distribuyen combustible en mayor cantidad, también con las tomas clandestinas; que no se respalden estos hechos, que no se vean normales. “Esto lo tenemos que erradicar por completo”, subrayó.
Y una de las medidas que han implementado en su gobierno es la adquisición de pipas en Estados Unidos, para lo cual el jueves en la noche viajó un grupo de funcionarios mexicanos a ese país, entre ellos el secretario de Relaciones Exteriores, la secretaria de Economía y la oficial mayor de la Secretaría de Hacienda.
El objetivo, señaló, es que “a partir del miércoles de la próxima semana estemos incrementando, vía pipas, la transportación de gasolinas para no depender del todo de los ductos y poder tener un control mejor de los ductos, que también hemos hablado varias veces que son insuficientes”.
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