En mi calidad de Presidente de Coparmex Hidalgo, me encuentro preocupado por la decisión que ha tomado la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) de la Secretaria de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SCT) con respecto a la regulación tarifaria a grupos aeroportuarios concesionarios, sin considerar las implicaciones que podría tener esta modificación en el sector y en la economía nacional.
La regulación tarifaria es un instrumento cuyo propósito es garantizar la eficiencia y la calidad de los servicios aeroportuarios y lograr un equilibrio entre los intereses de los usuarios, los inversionistas y el Estado. Sin embargo, cuando se aplica de forma arbitraria y unilateral, puede generar distorsiones en el mercado, afectar la confianza de los inversionistas y reducir la competitividad del sector.
Desde Coparmex nos pronunciamos por el estricto respeto y apego a la ley y a los términos bajo los cuales fueron otorgados los Títulos de Concesión, por el cumplimiento cabal de los procedimientos y por la generación e implementación de políticas públicas que pongan al centro a las personas, que privilegien la libre empresa y que busquen el desarrollo inclusivo de la nación, por lo que reprobamos la manera en que la AFAC decidió llevar a cabo cambios sustanciales en los términos de las bases de regulación tarifaria, sin medir las consecuencias económicas para miles de inversionistas y la afectación futura a millones de pasajeros, además de enviar un mensaje a la comunidad internacional de que la autoridad no respeta los contratos firmados con los particulares.
Lo que ha ocurrido con la reciente modificación que ha implementado la AFAC, ha cambiado sustancialmente los términos de las bases de regulación tarifaria que se habían acordado con los concesionarios que operan 41 aeropuertos en México. Esta medida ha provocado una caída de hasta el 26% en el valor de las acciones de los grupos aeroportuarios en la Bolsa Mexicana de Valores, lo que refleja el impacto negativo que tiene esta intervención en el mercado.
En Hidalgo, tenemos la oportunidad de aprovechar la cercanía con el AIFA para impulsar temas torales para la economía como lo es el sector turístico. Sin embargo, si se sigue interviniendo en el mercado aeroportuario sin respetar los contratos firmados con los particulares, se puede poner en riesgo la llegada de inversiones a esta terminal aérea, así como la calidad de los servicios que reciben los pasajeros.
Es por ello que, desde COPARMEX hacemos un llamado a la autoridad para que busque un acuerdo que no solo involucre, sino beneficie a todos los participantes de la industria, respetando las reglas del juego y fomentando la competencia leal. Solo así podremos garantizar el desarrollo del sector aeroportuario y su contribución al crecimiento económico del país.
¡Por más y mejores empresas para México!
