Los carnavales de Santa Ana Hueytlalpan en Tulancingo y el de Santiago Tulantepec, con más de cincuenta años de celebrarse de manera interrumpidos, quedan suspendidos, derivado de la pandemia por coronavirus.
Así lo determinaron autoridades de estos municipios quienes comentaron que con la medida se privilegia la salud de la población, al evitar conglomeraciones y con ello posibles contagios de Covid-19.
Estas fiestas tienen un gran arraigo entre la ciudadanía y por muchos años de llevarse a efecto, se reconoció por parte de los ediles Jorge Márquez y Dante Cárdenas.
Sin embargo, este miércoles se estableció por ambos alcaldes, que las celebraciones quedarán ya sin efecto, por la contingencia sanitaria que prevalece.
En Santa Ana Hueytlalpan, comunidad otomí de Tulancingo, se recordó que los días de carnaval acostumbraban a durar una semana.
Y es una de las fiestas más emotivas pues no solo la gente baila-corriendo, sino el ícono que lo distingue es el “torito”; la celebración habrá de esperar hasta el siguiente año.
Es un hecho que no habrá fiesta en cada uno de los seis barrios (La Raya, La Ciénega, Tecocuilco, La Palma, Atlalpan y La Luz), donde solían congregarse además en el centro, para luego por espacio de una semana, estar de fiesta.
Los habitantes han aceptado que esta actividad puede esperar pues lo primordial es que la gente privilegie su salud.
En tanto que el edil Dante Cárdenas comentó que el carnaval no se realizará en el municipio de Santiago Tulantepec donde por muchos años, han acudido los huehues o también conocidas como “mascaritas” de la Estación de Apulco (Metepec).
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