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Guadalupe López y María de Jesús Delgadillo son dos de las decenas de mujeres singuiluquenses que han aprendido a bordar tenangos o en listón, o bien a pintar en tela y a poner uñas de acrílico, entre otros talleres y que mediante el aprendizaje han logrado allegarse de recursos para cubrir gastos del hogar.
El objetivo de este tipo de capacitación, se informó en el municipio, es que féminas cuenten con las herramientas para auto emplearse, y algunas ya lo han logrado.
En estos casos, se mencionó, hay historias de éxito, por ejemplo, una mujer que pone uñas de acrílico entre familiares y conocidas, lo que le permite contar con recursos para apoyar en el gasto familiar.
Las féminas que se acercan a los talleres son de entre 14 a 70 años, quienes han bordado manteles y diversas prendas de vestir, fundas para cojines, servilletas, gorras y demás.
Los talleres han llegado a las localidades; Francisco I. Madero, Segundas Lajas, La Peña, Matías Rodríguez, Poza Rica, El Cebadal, San Rafael Amolucan, La Estancia y cabecera municipal.
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