Es un decreto sin consenso, se quejan comerciantes de Tulancingo

Comerciantes del Jardín La Floresta, en Tulancingo, uno de los puntos que mayor venta y consumo de cigarrillos registraba por ser el principal punto de encuentro en el centro de la ciudad, refirieron que la aplicación de la ley antitabaco que entró en vigor apenas el 15 de enero es "unilateral" y afecta los ingresos en sus negocios.

Pese a esto, están conscientes de que es una medida en pro de la salud de las personas y además que también ayudará a largo plazo al medio ambiente. Uno de ellos, cuyo nombre quiso reservarse, externó que funcionarios de Reglamentos acudieron a solo tres días de que entrara en vigor dicha actualización y les explicaron que ya no podrían exhibir productos de tabaco.

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Ley antitabaco es un golpe a la economía hidalguense

"Evidentemente es una medida que afecta a los fumadores, pero a uno también le pegan porque se sabe que si no enseñas no vendes. Es como si me dijeras 'puedes vender galletas pero no puedes exhibirlas', se me va a quedar todo ahí. No nos queda de otra más que acatar.", mencionó en entrevista.

Otro de ellos, ubicado en el parque frente a la Catedral, dijo que aunque es algo para beneficio de la gente, requería de consenso para conocer la opinión de comerciantes que subsisten con este ingreso: "es como la venta de alcohol, es algo malo pero hay gente que vive de eso. Estas decisiones requieren consenso, no imposición, ahora ya ni en los restaurantes van a dejar fumar y pues poco o mucho sí representa un ingreso para nosotros."

Y es que esta nueva ley, que entró en vigor desde el pasado domingo a nivel nacional, estipula que ni supermercados ni tiendas de la esquina o de conveniencia podrán exhibir productos de tabaco para su venta al público, además de que ya no puede haber publicidad de dicho producto. Asimismo, establece que queda prohibido fumar en terrazas, hoteles, parques, estadios, playas, restaurantes (ni con zona de fumadores), mercados o transporte público. Tampoco en centros de trabajo, centros comerciales, centros de espectáculos o entretenimiento, conciertos, escuelas (incluyendo universidades) o áreas donde se encuentren menores o adolescentes.

Quien no acate las anteriores disposiciones, deberá pagar una multa que va desde los mil y hasta los tres mil 112 pesos, además de un arresto de 13 a 36 horas o hasta 12 horas de trabajo comunitario. Para negocios que pasen por alto las normas, corren el riesgo de clausura y de cancelación de licencia sanitaria. Según precisó la Comisión Nacional contra las Adicciones, de aplicarse correctamente dentro de diez años se habrán evitado más de 49 mil muertes prematuras, 292 mil casos de enfermedades por tabaquismo y ahorros de 155 mil millones de pesos anuales al erario.