A causa del los altos costos de producción de los agroquímicos fertilizantes y plaguicidas del jitomate en los invernaderos de Ixmiquilpan y Chilcuautla, los campesinos han optado por cultivar en sus naves agrícolas nuevos productos como pepinos, fresas y pimiento morrón.
La capacidad instalada supera las mil hectáreas de invernaderos que generan más de mil empleos directos durante la temporada de siembra, y en la temporada de cosecha se duplican las vacantes.
Genaro Trejo Martínez, productor de jitomate del municipio de Chilcuautla informó que han sostenido reuniones con el secretario de agricultura Napoleón González, quien se ha comprometido a apoyar a los pequeños productores que tengan en posesión menos de una hectárea de invernaderos, sin embargo todos necesitan un rescate financiero.
“Le hemos solicitado créditos para el rescate de las naves de invernaderos, porque algunos campesinos han comenzado a emigrar a Estados Unidos, ya que no ven cómo afrontar el desgaste financiero para continuar cultivando sus parcelas”, destacó Trejo Martínez.
“Algunos productores han solicitado créditos ante la banca financiera privada, otros han vendido sus bienes muebles e inmuebles para poder pagar el costo de producción en los invernaderos", comentó el campesino.
“Estas inversiones fueron la atracción de remesas para poder desarrollar sus naves de invernaderos, y hace algunos años, fueron la razón para que los connacionales regresaran desde Estados Unidos a trabajar en sus lugares de origen, ahora es al revés, sus deudas los están obligando a volver a intentar cruzar hacia la frontera norte”, destacó el agricultor Genero Trejo.
Finalmente, señaló que autoridades dijeron que apoyarán con semillas de jitomate, sin embargo esa no es la solución, pues acusa que lo que el campo necesita es finaciamiento a través de créditos y fideicomisos.
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