Discapacitada vive una mala experiencia al comprar casa

Además de la inseguridad en Tizayuca, era riesgoso vivir en Paseos del Pedregal

Alberto González

  · lunes 26 de junio de 2023

En 2022 mostró los daños estructurales / BLANCA E. GUTIÉRREZ

TIZAYUCA, Hgo.- “Una mala experiencia” vivió Alba Ortiz García, originaria de la Ciudad de México, que compró casa en Paseos del Pedregal y le salió “chafa”, con fallas estructurales que amenazaban con colapsar y poner en riesgo su vida y de sus hijos; acordó con el representante legal de Conjunto Parnelli SA de CV y/o Hogares Unión recibir 400 mil pesos con los que no le alcanza para otra vivienda, relató.

Vive una “pesadilla” porque a sus 42 años, con una discapacidad permanente, un hijo en la secundaria y otra hija concluyendo la preparatoria, renta desde el año pasado en Haciendas de Tizayuca, puso dos negocios, pero uno está a punto de cerrarlo, y el dinero se le está acabando en gastos para mantener a la familia, confesó.

Infonavit Hidalgo no le ayudó a hacer valido el seguro, pues el juez cívico se puso de lado del constructor, fue gracias a la asesoría de un abogado que consiguió que el representante de la constructora, Roberto Hoyos, pactar la cantidad de dinero por su casa dúplex ubicada en Lapislázuli, que compró en 2015, informó.

“Jamás había agua” y era un suplicio subir y bajar escaleras con cubetas para llenar depósitos, acusó.

En ese año la adquirió por un crédito con Infonavit, tardaron seis meses en entregarla, el vendedor nunca le informó que Paseos del Pedregal se construyó sobre un suelo inestable; amuebló su hogar que pidió por su discapacidad en planta baja y le dieron planta alta, y a los pocos días, pese a la vigilancia, los amantes de lo ajeno se la vaciaron, recordó.

“Con esa inseguridad que se vive” en Tizayuca, tardó tiempo en habitarla y comprar otros enseres, porque además empezaron a salir los detalles, como cuarteaduras y otras fallas, que nunca se corrigieron o quedó satisfecha con las reparaciones, para el 2022 buscó ejercer el seguro de garantía vigente de 10 años, indicó.

“Todo un rollote”, resumió y no logró ejercerlo, terminó negociando y recibiendo 400 mil pesos por transferencia digital, que ahora lo que representaba su patrimonio se está “esfumando” porque no puede trabajar y ve imposible comprar otra vivienda.