ATOTONILCO DE TULA, Hgo.- La escuela primaria rural Alfredo V. Bonfil de la comunidad de San Antonio, se vio obligada a cerrar sus puertas, debido a los constantes robos y vandalismos de que ha sido objeto. La escuela no cuenta con energía eléctrica, ni agua potable, porque se robaron el cableado y los tinacos.
Ayer los integrantes de la Asociación de Padres de Familia, hicieron la denuncia y un llamado al gobierno municipal para que brinde seguridad a la institución y les apoye a habilitarla de nueva cuenta para que puedan recibir a los alumnos.
Indicaron que la escuela ha sufrido toda clase de robos durante el tiempo que cerró sus puertas por la pandemia, y la tarde del domingo los delincuentes ingresaron de nueva cuenta y como ya no había nada de valor, que llevarse,porque se robaron todo el equipo de cómputo, la vandalizaron, rompiendo algunos cristales y se llevaron hasta los artículos de limpieza.
“Ya se llevaron hasta el cableado eléctrico y los tinacos de los baños. Siempre hemos sido víctimas de la delincuencia y nosotros siempre lo arreglamos, pero ya estamos cansados. La escuela está en muy malas condiciones y no es porque los padres la dejáramos abandonado sino porque las personas entran a tacar la escuela, a hacer destrozos.Además, nuestra cisterna ya no sirve, y no tenemos agua” expresó la presidenta de la sociedad de padres Dulce María Gutiérrez Tovar.
Solicitaron que el alcalde Jaime Ramírez Tovar les apoye a hacer las reparaciones y que envíe más vigilancia a la comunidad, para que en enero los menores puedan regresar a clases, porque han determinado que ya lo abrirán porque no hay las condiciones para que los más de cien menores puedan tomar clases presenciales.
