El único ejemplar felino que existía en el Zoológico de Tulancingo, falleció.
El jaguar negro murió, posiblemente, debido a su longevidad. Su salud fue en detrimento en los últimos años; tenía padecimientos crónicos por su edad avanzada de 29 años, se dijo en el área.
“Tenía artritis reumatoide y falta de dentadura, lo cual le complicaba la ingesta de alimentos, de ahí que llevara una dieta especial, y aunque le proveíamos de cuidados como vitaminas y calor ya no resistió”, dijo Ilse Quijano García, directora del espacio faunístico quien detalló que el peso del animal superaba los 60 kilogramos.
Actualmente el jaguar, está en las camas de congelación del Zoológico, en tanto se realiza la necropsia, para cumplir con los lineamientos establecidos por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, por tratarse de un ejemplar inventariado por esa dependencia.
Fue en 1988 cuando el jaguar llegó a esta ciudad, en ese entonces ya contaba con edad adulta, sumándose a los atractivos del parque, dijo la funcionaria
Estuvo en exhibición al menos por poco más de dos décadas, 22 años y en este tiempo fueron diversas generaciones que notaron su evolución cronológica.
El jaguar nunca se reprodujo en esta ciudad, por la tanto no hubo crías en las tres décadas de vida.
En este mismo mes, se prevé, quede atendida la baja del ejemplar ante PROFEPA y de esta manera también quedará actualizado en lo interno el patrimonio faunístico que comprende de 186 animales de 52 especies.
Se tiene previsto que, una vez atendido el procedimiento de baja, posiblemente el felino sea ingresado a taxidermia para su futura exhibición.
En el lugar del jaguar, se analiza la especie que ocupara el espacio del felino.
El Zoológico de Tulancingo tiene un alto porcentaje de animales en edad senil con edades arriba de los 20 años.
