Tulancingo, Hidalgo.- En Tulancingo mil 186 negocios(representan 14 por ciento del total de los locales) tienen permisocon venta de alcohol, de los cuales dos grandes empresas cervecerastienen 217 y 36 licencias de funcionamiento. Y se tienen censadas600 misceláneas con venta de bebidas etílicas, aunque no todoslos registros están ocupados, dijeron en la Dirección deReglamentos y Espectáculos. La titular Viridiana Hernándezcomentó que lleva un mayor control sobre los establecimientoscomerciales con venta de bebidas embriagantes. “Condicionalmentepara realizar una apertura, deben hacernos llegar un oficio desolicitud para autorización”. Agregó: “Se examina con laDirección de Licencias y Permisos, de acuerdo con el PlanMunicipal de Desarrollo para conocer si es viable laautorización”. De esa cifra, hay 137 establecimientos entrebares, cantinas, discos y centros botaneros, ubicados sobre todo enla periferia de la ciudad. La informante refirió que se cuenta con“registros pasivos”, de los cuales son 96 de alto impacto,nueve de bajo impacto y 57 de las cervecerías. De hecho, haynegocios donde se venden “micheladas” y “vodkadas”; elcliente puede comprar y consumir fácilmente tras ver el anuncio encartulinas. Hay algunas que refieren “para llevar”, es decir,como si se permitiera consumir alcohol en la vía pública,violando la normativa, el artículo 74 del Bando de Policía yGobierno prohíbe beber embriagantes en las calles de la ciudad.Insistió en que es responsabilidad de quien compra y las consumeen la vía pública. Se sabe que hay negocios que tienen el permisode “copeo” o de “bebidas en botella abierta”, pero dependedel cliente, ser responsable de esta situación, que se reconoce,es un vacío en el Bando de Policía y Gobierno. En tienditas de laesquina, bares, cantinas, pulquerías, discotecas, abarroteras,vinaterías, centros botaneros, y otros negocios expendenembriagantes. En comunidades se ha advertido que todavía hayalgunos negocios donde se expende el producto, por las llamadas“ventanitas”, a altas horas de la noche o madrugada. Alrespecto, las autoridades han referido que el problema data de haceaños. Es decir, se ha heredado. Pero, en la actual administraciónse ha hecho énfasis en “operativos sorpresa”, no solamente enla zona centro, ni en colonias aledañas a la cabecera deTulancingo sino también en la periferia. En fines de semana se ven“autos sardina”, donde adolescentes conducen con cerveza enmano, y es por ello que igualmente se enfatiza en los operativos demanera coordinada con Seguridad Pública. Están los que ademáslucen “la chela” al conducir una motocicleta, lo que sin dudaalguna, conlleva riesgos no únicamente para quien maneja la unidadsino para terceros. Igualmente se ha visto a jóvenes llevando susbotellas envueltas en papel, o hay quienes las exhiben. De hecho enalgunos tramos carreteros en la región Tulancingo, hay negociosdonde se expenden bebidas etílicas y operan como antros o barras,las cuales, incluso, están expuestas en la vía pública. Ahí seobservan hombres y mujeres adolescentes y adultos que consumenalcohol en cualquiera de sus presentaciones pero principalmentecerveza. El alcoholismo en Tulancingo, por muchos años, se haconsiderado, un problema de salud pública, y la primera adicciónen los jóvenes.
Tulancingo, Hidalgo.- En Tulancingo mil 186 negocios(representan 14 por ciento del total de los locales) tienen permisocon venta de alcohol, de los cuales dos grandes empresas cervecerastienen 217 y 36 licencias de funcionamiento. Y se tienen censadas600 misceláneas con venta de bebidas etílicas, aunque no todoslos registros están ocupados, dijeron en la Dirección deReglamentos y Espectáculos. La titular Viridiana Hernándezcomentó que lleva un mayor control sobre los establecimientoscomerciales con venta de bebidas embriagantes. “Condicionalmentepara realizar una apertura, deben hacernos llegar un oficio desolicitud para autorización”. Agregó: “Se examina con laDirección de Licencias y Permisos, de acuerdo con el PlanMunicipal de Desarrollo para conocer si es viable laautorización”. De esa cifra, hay 137 establecimientos entrebares, cantinas, discos y centros botaneros, ubicados sobre todo enla periferia de la ciudad. La informante refirió que se cuenta con“registros pasivos”, de los cuales son 96 de alto impacto,nueve de bajo impacto y 57 de las cervecerías. De hecho, haynegocios donde se venden “micheladas” y “vodkadas”; elcliente puede comprar y consumir fácilmente tras ver el anuncio encartulinas. Hay algunas que refieren “para llevar”, es decir,como si se permitiera consumir alcohol en la vía pública,violando la normativa, el artículo 74 del Bando de Policía yGobierno prohíbe beber embriagantes en las calles de la ciudad.Insistió en que es responsabilidad de quien compra y las consumeen la vía pública. Se sabe que hay negocios que tienen el permisode “copeo” o de “bebidas en botella abierta”, pero dependedel cliente, ser responsable de esta situación, que se reconoce,es un vacío en el Bando de Policía y Gobierno. En tienditas de laesquina, bares, cantinas, pulquerías, discotecas, abarroteras,vinaterías, centros botaneros, y otros negocios expendenembriagantes. En comunidades se ha advertido que todavía hayalgunos negocios donde se expende el producto, por las llamadas“ventanitas”, a altas horas de la noche o madrugada. Alrespecto, las autoridades han referido que el problema data de haceaños. Es decir, se ha heredado. Pero, en la actual administraciónse ha hecho énfasis en “operativos sorpresa”, no solamente enla zona centro, ni en colonias aledañas a la cabecera deTulancingo sino también en la periferia. En fines de semana se ven“autos sardina”, donde adolescentes conducen con cerveza enmano, y es por ello que igualmente se enfatiza en los operativos demanera coordinada con Seguridad Pública. Están los que ademáslucen “la chela” al conducir una motocicleta, lo que sin dudaalguna, conlleva riesgos no únicamente para quien maneja la unidadsino para terceros. Igualmente se ha visto a jóvenes llevando susbotellas envueltas en papel, o hay quienes las exhiben. De hecho enalgunos tramos carreteros en la región Tulancingo, hay negociosdonde se expenden bebidas etílicas y operan como antros o barras,las cuales, incluso, están expuestas en la vía pública. Ahí seobservan hombres y mujeres adolescentes y adultos que consumenalcohol en cualquiera de sus presentaciones pero principalmentecerveza. El alcoholismo en Tulancingo, por muchos años, se haconsiderado, un problema de salud pública, y la primera adicciónen los jóvenes.
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