Grandes marcas continúan con plagio

Una queja más sobre el uso que hacen marcas internacionales de los tenangos. Ahora fue Louis Vuitton, con un sillón que se comercializaba en 301 mil pesos aproximadamente (12 mil 800 libras esterlinas en lo que se ofreció)

Correspondió a Alejandra Frausto, secretaria de Cultura del Gobierno Federal generar una misiva para que se aclare si en este producto participaron manos tenanguenses: ‘‘México no está cerrado al diálogo con el mundo, por el contrario: queremos ampliar el intercambio y la colaboración con las firmas que más han contribuido a la valoración de la artesanía como objeto de alto valor artístico y comercial”

Al respecto, insistió el edil de Tenango de Doria, Aldo Molina, que los artesanos, merecen respeto y reconocimiento a su labor, por ello no han desistido en que sea declarado patrimonio.

Los tenangos, son parte del patrimonio cultural que tiene México y donde los dibujantes de San Pablo, El Nanthe, y Ejido López Mateos, han puesto en alto el nombre de estas creaciones, que, comentó no deben ser consideradas una moda, sino arte.

Y es que recientemente la marca Louis Vuitton puso a la venta una silla, —colección Dolls by Raw Edges— con elementos propios que distinguen a la comunidad de San Nicolás, cuna del tenango, en Tenango de Doria, Hidalgo, por lo que como ya se dijo, la Secretaría de Cultura Federal se pronunció.

Sin embargo, no ha sido la única firma, recientemente (en junio) igualmente hubo indignación porque algunas prendas de la diseñadora Carolina Herrera tenían elementos propios de esta región de la Otomí – tepehua. Y, meses atrás la editorial Alfaguara con la portada de un libro. Aparte en la lista destacan: Liverpool y otras más como Nestlé y Bonafont.

“El plagio de estas grandes marcas, no es reciente, se fue dando conforme se promovieron estos diseños, comenzaron con tazas, libretas, tenis, ropa, pero desde hace seis años que se agudizó la problemática”

Para el edil Aldo Molina este patrimonio artesanal permitirá que los mismos tenanguenses peleen por sus derechos, sin intermediarios, y la idea, agregó que entre ellos conformen un comité que vele por los intereses de la gente que dibuja y borda.