TULA DE ALLENDE, HGO.-Pérdidas materiales que ascienden a aproximadamente dos mil cincuenta millones de pesos en total, sin contar las grandes empresas como bancos y tiendas de conveniencia que no proporcionaron información y más de seiscientos comercios afectados dejo la pasada inundación ocurrida en esta ciudad.

Así lo expresó, ayer, el director general de la Cámara Nacional de Comercio (CANACO) Tula, Gerardo Castillo García, quien agregó que incluso hay comerciantes que aún no pueden reabrir sus respectivos establecimientos tras más de seis meses que se registró la contingencia aquí.

“Sigue muy complicado para muchos comerciantes establecidos poder reactivar su economía luego de que ocurrió la pasada inundación en esta ciudad, ya que hasta el momento tienen bajas ventas y todavía existe en este gremio incertidumbre y zozobra por el tema del Río Tula” indicó.

El entrevistado mencionó que todos los negocios que han vuelto a abrir sus puertas han sido con préstamos familiares, agiotistas o cajas de ahorro y bancos, sin embargo, la economía local continúa lastimada y no hay mucho poder adquisitivo entre los habitantes tulenses.

Gerardo Castillo citó que Tula aún no se recupera económicamente a pesar que hay gente en las calles, pues no hay ventas para numerosos comerciantes del primer cuadro de la ciudad.

Además que muchas tiendas pequeñas cerraron por la inundación y llegaron algunos negocios nuevos a sustituirlas, sin embargo, muchos locales comerciales siguen cerrados hasta ayer.

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El director general de la CANACO Tula, finalmente precisó que son aproximadamente seiscientos comercios establecidos que están afiliados a dicha cámara de comercio y tienen diversos giros como son papelerías, estéticas, zapaterías, tiendas de ropa y zapatos, restaurantes, cafeterías, tlapalerías, ferreterías y misceláneas.