/ martes 13 de agosto de 2019

Atorada liberación de cuenta de 2016

ASEH revisa ejercicio de gobierno saliente y entrante en ese año fiscal

El exalcalde de Apan, Fernando Hernández, no puede recibir su carta de liberación de la cuenta pública 2016, debido a que el gobierno municipal que lo relevó se le ha complicado la comprobación que le corresponde de los últimos cuatro meses de ese año ante la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH).

Entrevistado afuera del organismo fiscalizador la mañana del lunes, donde acudió a informarse sobre los resultados a la revisión de sus observaciones, informó que ya entregó la solventación a un millón de pesos que correspondían a los últimos ocho meses del gobierno 2012-2016 que encabezó.

“Era en el rubro de combustibles, nos faltaron las bitácoras del parque vehicular para respaldar el consumo y gasto de gasolina de los ocho meses del 2016, en que era yo el alcalde.

Les comenté a los funcionarios de la ASEH, que podían hacer un comparativo con el mismo periodo de 2015 y entraba en los parámetros de gasto”.

Oficialmente, explicó, la ASEH de acuerdo con sus facultades revisa toda la cuenta pública de un año fiscal, en este caso 2016, “cuando fue la transición de un presidente municipal a otro, por eso no me entregan mi oficio de liberación", comentó el exalcalde.

Oportunamente, en 2017, el síndico procurador del ayuntamiento 2016-2020, Edgar Cruz, anticipó que por las irregularidades cometidas en esos cuatro meses por el ejecutivo municipal habría problemas, derivado de la alza de salarios, adquisiciones poco transparentes y el bono de fin de año al cabildo, a excepción de él, entre otras que ingresó a la ASEH.

El exalcalde de Apan, Fernando Hernández, no puede recibir su carta de liberación de la cuenta pública 2016, debido a que el gobierno municipal que lo relevó se le ha complicado la comprobación que le corresponde de los últimos cuatro meses de ese año ante la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH).

Entrevistado afuera del organismo fiscalizador la mañana del lunes, donde acudió a informarse sobre los resultados a la revisión de sus observaciones, informó que ya entregó la solventación a un millón de pesos que correspondían a los últimos ocho meses del gobierno 2012-2016 que encabezó.

“Era en el rubro de combustibles, nos faltaron las bitácoras del parque vehicular para respaldar el consumo y gasto de gasolina de los ocho meses del 2016, en que era yo el alcalde.

Les comenté a los funcionarios de la ASEH, que podían hacer un comparativo con el mismo periodo de 2015 y entraba en los parámetros de gasto”.

Oficialmente, explicó, la ASEH de acuerdo con sus facultades revisa toda la cuenta pública de un año fiscal, en este caso 2016, “cuando fue la transición de un presidente municipal a otro, por eso no me entregan mi oficio de liberación", comentó el exalcalde.

Oportunamente, en 2017, el síndico procurador del ayuntamiento 2016-2020, Edgar Cruz, anticipó que por las irregularidades cometidas en esos cuatro meses por el ejecutivo municipal habría problemas, derivado de la alza de salarios, adquisiciones poco transparentes y el bono de fin de año al cabildo, a excepción de él, entre otras que ingresó a la ASEH.

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