La trasnacional Unilever, que aglutina 400 marcas, entre las que se encuentran los jabones Dove, las paletas Magnum, y hasta el caldo de pollo, Knorr, destinará mil millones de euros para combatir el cambio climático, a través de un fondo para apoyar el clima, la naturaleza y la conservación del agua.
Este monto equivale a poco más 26 mil millones de pesos, equivalentes al presupuesto destinado este año al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
En entrevista, Jorge Acosta, gerente de sustentabilidad para Latinoamérica, mencionó que todas sus fábricas a nivel mundial utilizan energía renovable.
"Seguramente, parte de esos mil millones de euros se usarán para estos programas que tenemos para la mejora continua hacia el interior de las fábricas, pero también hacia las comunidades y hacia la gente que nos provee de materias primas como los agricultores", comentó el directivo de la compañía.
En este sentido, impulsarán la creación de un Código de Agricultura Regenerativa, para empoderar a una nueva generación de agricultores y pequeños productores para promover el cuidado de la tierra.
También, se comprometió a eliminar la huella de carbono de todos sus productos y promoverá entre sus socios que declaren en cada factura sus emisiones por productos y servicios suministrados.
Unilever implementará programas de administración de agua en 100 comunidades para 2030, a través de un mapeo en el que se identifiquen zonas de alta marginación o en donde se ubique al agua como una limitante para su desarrollo.
Adelantó que Unilever se unirá al 2030 Water Resources Group, del Banco Mundial, para enfrentar problemas de abastecimiento y calidad del agua a nivel global de la mano de otras organizaciones, ya que es un elemento clave para sus procesos productivos como para toda la cadena de suministro.
"El agua se liga definitivamente a todos los procesos que tenemos en la cadena, desde el vegetal que es cultivado con el agricultor que llega a una de nuestras marcas, como Knorr, hasta el uso del mismo vegetal ya en la caja, porque tal vez es una sopa deshidratada de ese vegetal o tiene algún elemento en el que se va a utilizar agua. Nosotros no sólo lo vemos en nuestras operaciones, sino en toda la cadena de suministro", refirió.
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