Avanza la sequía. El 60 por ciento del territorio nacional presenta un grado de falta de agua y ocho estados tienen el cien por ciento de afectación por bajo caudal, como Aguascalientes, Chihuahua, Ciudad de México, Guanajuato, Hidalgo, Morelos, Querétaro y Sinaloa.
En tanto que el Estado de México tiene el 97.6 y Sonora el 98.6 por ciento de sus territorios con algún grado de sequía. “Abandonar a la agricultura a su suerte, no solo afectará a ese subsector sino a todo el país, porque los alimentos subirán de precio, como ya ocurre”, advirtió el doctor José Escalante.
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Presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos (UMFFAAC), comentó que de acuerdo a la Secretaría de Agricultura, el 75 por ciento del agua dulce se utiliza en la agricultura.
Según el Censo Agropecuario 2022, del total de la superficie agrícola, sólo 6 millones 683 mil 986 hectáreas cuenta con riego, esto es el 26 por ciento del total de las tierras cultivadas.
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Refirió que cifras del Monitor de la Sequía en México, de la Comisión Nacional del Agua, al 15 de este mes de febrero, el porcentaje de áreas con sequía de moderada a excepcional fue del 60 por ciento.
Sin embargo, de los 2 mil 471 municipios del país mil 550 tienen algún grado de sequía; 529 están anormalmente secos y solo 392 no tienen afectación.
Expresó que México debe fortalecer la ciencia aplicada al campo para hacer frente a esta crisis que se presenta en el sector rural, por la sequía que afecta a más de la mitad del territorio nacional y que amenaza, junto con otros factores, con reducir la producción de alimentos.
Destacó que para la UMFFAAC, la ciencia, la especialización y la tecnificación en el campo son de suma importancia, sobre todo en estos momentos de crisis por la sequía.
Y uno de los productos que pueden maximizar el aprovechamiento del agua en los periodos de sequía es el glifosato porque evita la labranza del suelo, lo que a su vez reduce la evaporación del agua y ayuda a retener la humedad.
Además, el glifosato evita la quema de residuos de las cosechas e impide las emisiones contaminantes que produce esta práctica.
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Por ello es necesario que se revise el decreto que prohibirá el uso de este herbicida a partir del 1 de abril, ya que no se ha encontrado un producto que pueda sustituir la eficiencia, eficacia y el bajo coto que tiene para el productor, dijo el dirigente de la UMFFAAC.