Con el firme objetivo de buscar sus primeros triunfos del año y sumar puntos a su ranking personal, los boxeadores de Tulancingo, Fernando “Pillo” Curiel y Diego Hernández, tienen compromisos de pelea en mayo próximo, en el Estado de México y Tijuana, respectivamente.
Ambos han pagado caro la falta de entrenamiento debido a la pandemia y sus resultados no han sido los mejores en estos primeros meses del año; sin embargo, trabajan a conciencia de mejorar para futuras competencias.
Tras el mal sabor de boca que le dejó la derrota en su pelea más reciente, en Nayarit, Pillo Curiel, busca retornar al protagonismo boxístico, y el próximo 1 de mayo enfrenta al “Modelo” David Requena, en una función profesional que se desarrollará en la Arena San Juan, en el Estado de México.
Por su parte, Diego Hernández se medirá también en la Big Punch de Tijuana, aún con fecha y rival por definir, también en un evento de box profesional.
Ambos pupilos de Antonio Curiel, profesor de la Escuela Municipal de Box de Tulancingo, quienes lamentablemente no han tenido la preparación adecuada para sus compromisos de lo que va del año, debido al cierre de espacios públicos, como la unidad deportiva Javier Rojo Gómez, como medida sanitaria por la pandemia del covid-19.
