/ viernes 5 de abril de 2019

San Lorenzo, la comunidad que demuestra su amor con ramos monumentales

En Uruapan, Michoacán se conmemora el inicio de los Días Santos con palmas que miden casi dos metros; una tradición que reúne a la familia

Es Domingo de Ramos y son las 7:00 de la mañana. Mientras los habitantes de San Lorenzo en Uruapan, Michoacán se despiertan con el sonido de los gallos, una joven purépecha cruza las calles del pueblo, alrededor solo se escuchan los perros ladrar. El cielo está decorado con papel picado de colores y los tacones de sus zapatillas marcan cada uno de sus pasos, como latidos del corazón.

Cruza tapetes de bugambilias que alguien puso para ella, lleva una falda – sabanilla- de gala, encima un ceñidor plateado muy brilloso, el que eligió para vestir ese día. A lo lejos parece que carga una cruz en su espalda, pero al acercarse, una palma se asoma. Mide casi dos metros, la recibió la noche anterior en su casa luego de que José Martín, su novio, y toda la familia (padrinos, abuelos, niños, hermanos, primos) pasaron casi todo el día decorándola para que ella pudiera llevarla al templo el domingo: una costumbre, una demostración de amor.

Pocos del pueblo saben cuándo comenzó esta tradición que une a las familias; sin embargo, siguen fielmente el ritual. Seis semanas antes los jóvenes se acercan con los papás de la chica, le llevan flores cada viernes y piden permiso para poder entregar la monumental palma. Si ellos aceptan, la familia del varón se reúne en vísperas del Domingo de Ramos, colaboran con listones, flores y otros elementos que pudieran gustarle a ella, hay quienes incluso le ponen dinero, prendas o hasta galletas.

La fiesta transcurre entre comilonas, bebidas y música purépecha, todos bailan y se turnan para no dejar que la palma se caiga. Pueden pasar horas antes de salir con el arreglo, en familia, siempre en familia. Todo San Lorenzo celebra el amor.

Aunque el mundo se sincroniza cada año para recibir la Cuaresma y posteriormente, la Semana Santa, en paralelo se celebran distintas costumbres que alimentan el alma. Esta es una de las que se realizan en México, en la Meseta Purépecha, la puerta del cielo.

RELIGIÓN
El Domingo de Ramos conmemora la entrada de Jesús a Jerusalén; este año se celebra el 14 de abril

COINCIDENCIA
San Lorenzo, el santo de esta localidad porta una palma de mártir

SABÍAS QUE…

No hay edad ni compromiso para los que participan en esta tradición; se puede obsequiar la palma entre a las amigas y a niñas menores de edad

PARA QUEDARSE
Si visitarás Uruapan esta temporada, puedes aprovechar para comprar artesanías en el Tianguis de Domingo de Ramos, del 12 al 28 de abril.

También puedes leer
Jardines botánicos nacionales, travesías para florecer


Es Domingo de Ramos y son las 7:00 de la mañana. Mientras los habitantes de San Lorenzo en Uruapan, Michoacán se despiertan con el sonido de los gallos, una joven purépecha cruza las calles del pueblo, alrededor solo se escuchan los perros ladrar. El cielo está decorado con papel picado de colores y los tacones de sus zapatillas marcan cada uno de sus pasos, como latidos del corazón.

Cruza tapetes de bugambilias que alguien puso para ella, lleva una falda – sabanilla- de gala, encima un ceñidor plateado muy brilloso, el que eligió para vestir ese día. A lo lejos parece que carga una cruz en su espalda, pero al acercarse, una palma se asoma. Mide casi dos metros, la recibió la noche anterior en su casa luego de que José Martín, su novio, y toda la familia (padrinos, abuelos, niños, hermanos, primos) pasaron casi todo el día decorándola para que ella pudiera llevarla al templo el domingo: una costumbre, una demostración de amor.

Pocos del pueblo saben cuándo comenzó esta tradición que une a las familias; sin embargo, siguen fielmente el ritual. Seis semanas antes los jóvenes se acercan con los papás de la chica, le llevan flores cada viernes y piden permiso para poder entregar la monumental palma. Si ellos aceptan, la familia del varón se reúne en vísperas del Domingo de Ramos, colaboran con listones, flores y otros elementos que pudieran gustarle a ella, hay quienes incluso le ponen dinero, prendas o hasta galletas.

La fiesta transcurre entre comilonas, bebidas y música purépecha, todos bailan y se turnan para no dejar que la palma se caiga. Pueden pasar horas antes de salir con el arreglo, en familia, siempre en familia. Todo San Lorenzo celebra el amor.

Aunque el mundo se sincroniza cada año para recibir la Cuaresma y posteriormente, la Semana Santa, en paralelo se celebran distintas costumbres que alimentan el alma. Esta es una de las que se realizan en México, en la Meseta Purépecha, la puerta del cielo.

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