El pasado domingo más de 93 millones de ciudadanas y ciudadanos mexicanos estuvieron convocados para ejercer su voto en una jornada histórica. Estuvieron en disputa 15 gubernaturas, 500 curules de la Cámara de Diputados federal, 1923 presidencias municipales y 1063 diputaciones locales, entre otros cargos. Este super domingo electoral fue producto de la reforma política electoral de 2014, mediante la cual se estructuró el actual sistema nacional de elecciones.
Las reformas constitucionales de aquel año buscaban responder a dos problemáticas específicas, la crisis de representación política y las condiciones de inequidad recurrentes en cada proceso electoral, especialmente por lo ocurrido en la elección presidencial de 2012, en la cual el flujo de efectivo circulante en el país aumentó “inexplicablemente” durante los primeros seis meses de ese año en 37 mil millones de pesos, según cifras del Banco de México.
Desgraciadamente en esta elección ha destacado una problemática adicional, la violencia en las campañas ejercida tanto por el crimen organizado que pretende imponer funcionarios públicos, como por grupos armados creados por los mismos candidatos. Hasta el día de la elección se reportaron atentados, secuestros y homicidios en contra de candidatos, militantes, así como dirigentes partidistas.
Más de 900 agresiones o delitos han sido cometidos en contra de aspirantes y candidatos desde septiembre, 91 personas fueron asesinadas. La violencia crítica que ha enmarcado este proceso electoral nos obliga a todas y todos los legisladores que conformaremos la LXV legislatura a tomar cartas en el asunto y coadyuvar para resolver este desafío criminal que pone en riesgo, sin ninguna exageración, la vigencia del Estado.
Por otro lado, celebro la civilidad y el entusiasmo con el que millones de personas salieron a votar superando el 50% de participación, una cifra inédita para una elección intermedia. Mi reconocimiento al más de un millón cuatrocientos mil ciudadanos que fungieron como funcionarios en las casillas y que generosamente donaron su tiempo para sacar adelante el proceso electoral.
El pueblo de México ha refrendado la confianza en el presidente Andrés Manuel López Obrador y Morena ha mantenido la mayoría en la Cámara de Diputados y amplía su presencia en el territorio nacional. De gobernar actualmente 7 entidades federativas, nuestro movimiento se perfila para gobernar 11 estados más. Mis felicitaciones a todas las candidatas y candidatos. La cuarta transformación no se detiene, se consolida. Enhorabuena México.
PARTÍCULA_RIZANDO
En los últimos años, las encuestas han proliferado sin ningún tipo de regulación por parte de la autoridad electoral. En este proceso surgieron distintos ejercicios estadísticos que lejos de tener rigor científico y una metodología sólida, se convirtieron en herramientas de promoción a través de los cuales, algunas casas encuestadoras obtuvieron beneficios económicos, vendiendo los primeros lugares.
